Liga Cae contra la U Catolica


La Universidad Católica dejó en claro que su objetivo también es ingresar al hexagonal final. Mientras, Liga demostró que esta segunda etapa del campeonato será solo un banco de pruebas.

Los albos afrontaron el partido del sábado 19 de julio ante la ‘Chatoleí’ con un equipo ‘C’ y cayó goleado 3-0, en el Atahualpa.

Equipo ‘C’ porque la nómina alterna de Liga ha sido conformada con regularidad por Daniel Viteri; Jefferson Lara, Diego Calderón, Israel Chango; William Araujo, Pedro Larrea, Alfonso Obregón, Éder Vaca, Christian Suárez; Franklin Salas y Agustín Delgado. De ellos, junto a juveniles, solo jugaron esa noche Viteri, Calderón, Vaca y Suárez.

Bajo la dirección de José Di Leo, asistente del técnico Edgardo Bauza -quien está de vacaciones en las islas Galápagos-, la ‘U’ jugó un sistema 3-4-1-2. Calderón fue el gran sacrificado en la zaga, pues sus acompañantes, los juveniles Lara y Lenín Ibujez, erraron permanentemente en la marca y lucieron nerviosos.

De esto se aprovechó la Católica, con un juego vistoso, veloz y contundente. Por ello dispuso siempre de las mejores opciones y dominó ampliamente a su rival, que padeció de descoordinaciones. Así abrió el marcador el juvenil Pablo Ochoa, tras un error en una salida de los albos (34’).

El balón quedó en los pies del argentino Diego Figueroa, quien con su gran visión de juego puso el pase en profundidad para que Ochoa derrote a Viteri.

La Católica, dirigida por Víctor Riggio, apeló durante todo el partido a la clase de Figueroa. De sus pies nacieron las mejores jugadas. En la creación estuvo acompañado por Matías González. En tanto que Santiago Morales fue un recurrente lanzador.

Liga, por su parte, intentó llegar sobre el pórtico local con el empuje y talento de Éder Vaca, su jugador más claro. A momentos formó una dupla de hábil desequilibrio con Danny Vaca. El recurso principal, tras la asociación de paredes, fue el remate de media y larga distancia que el arquero Róbinson Sánchez controló.

Los otros acompañantes en ataque fueron Christian Suárez, quien pasó inadvertido, y Víctor Estupiñán. En el medio campo, Larrea, Byron Camacho y Alejandro Espinoza sufrieron para contener a los cinco volantes que puso la Católica para dominar el encuentro, algo clave para el triunfo.

El segundo gol fue producto de ese agobiante dominio de los pupilos de Riggio. El debutante delantero peruano, Roberto Silva, procuró habilitar de cabeza hacia atrás a Figueroa, pero el balón se desvió en la testa de Camacho para marcar en su propio arco (75’).

Sin embargo, pese al resultado adverso, los juveniles albos mostraron ímpetu y buscaron el descuento. Sabían que era una vitrina que no podían desaprovechar. Quizá con el paso del tiempo y más trabajo, este plantel será la base del equipo a futuro. Mientras tanto, deberán corregir y crecer.

Calderón, en la desesperación por corregir otra desconcentración, cometió un penal sobre Armando Gómez que Figueroa concretó (80’). Así, mientras la Católica se afina, Liga prueba.

No hay comentarios: